Por Cindy Vera
"Toda
la vida para este amor", le dice Santiago a su gran amor: el fútbol. Él es
el protagonista de esta nota donde nos cuenta sus buenos momentos en las
canchas como así también los malos, hace más de un año que está sin jugar por
haber sufrido una grave lesión, pero hoy ya recuperado y en condiciones, espera
con ansias el regreso del fútbol para volver a jugar."
-¿Cuándo empezaste a jugar y por qué clubes pasaste?
“En el año 2005 llegue a Talleres a
través de una prueba, antes jugaba en una escuelita de futbol de mi tío que se
llamaba La Docta, por suerte pude quedar y empecé inferiores ahí que fue mi
primer club, estuve ahí en Afa hasta el 2009 que descendió, ahí me fui a
Newells, estuve un tiempo y como no tenía el pase me tuve que volver, y en el
2012 volví a jugar en Atalaya, hasta el día de hoy”.
-Teniendo en cuenta tu paso por Talleres, ¿qué recuerdos tenes de esos
años? (viajes, torneos, canchas)
“Lo que más recuerdo es haber jugado
el Torneo de Afa sin dudas, es otro nivel, al principio en el primer año nos
costó mucho pasar de la Liga a Afa, se notaba la diferencia peor con el tiempo
nos adaptamos. Jugar en esos predios, en esas canchas la verdad que eso fue lo
mejor que viví en inferiores. También tuve muchos buenos compañeros y pude
hacer muchos amigos en el futbol, eso es incomparable. Hasta el día de hoy
tenemos un grupo y nos hablamos, recordamos todo y nos reímos de muchas
anécdotas.”
-Lograste hacer amistades con jugadores que tuvieron paso por la Primera
de Talleres, ¿quiénes son? ¿hay alguna anécdota para contar?
“Si tuve la suerte de hacer grandes amigos
en el club, los que llegaron a primera son Victorio Ramis, Claudio "Cuni" Frances, Gabriel Carbajal,
Favio Alvarez con quien jugábamos juntos y es muy amigo, tengo una anécdota con
él en un viaje a Rafaela, estábamos en un hotel donde las habitaciones eran
dobles, cada uno dormía con distintos compañeros, habíamos clasificado a la
final y al otro día jugábamos, y tipo 4 de la mañana me despierta Favio para
decirme que su compañero era sonámbulo, así que le dije que se acostara conmigo
y dormimos los dos en una cama de una plaza, cosas de esas tengo miles, al otro
día nos levantamos para jugar la final y ganamos 4 a 0, salimos campeones, los
viajes eran una cosa de locos”.
-¿Qué significa Atalaya en tu vida?
“Atalaya es mi familia, yo hace 8
años llegue de la mano de Piero Foglia y Ángel Nuñez, he compartido muchas
cosas buenas. Estos últimos años, Atalaya para el fútbol de Córdoba es muy
fuerte, de los últimos Torneo Regionales clasificamos a dos y siempre nos
preparamos para dar pelea, eso es una materia pendiente ascender al Federal A.
Todos saben que Atalaya recluta y forma jugadores y buenas personas, eso habla
muy bien del club”.
-Sufriste una lesión importante que te alejo de las canchas por un largo
tiempo, ¿qué te paso y cuál fue el proceso de recuperación?
“El año pasado tuve la mala suerte en
un amistoso antes de arrancar el Torneo Regional, en una jugada que voy a
cabecear el arquero se me cae encima y me doblo la rodilla, cuando me hice los
estudios tenía mal los ligamentos cruzados y los meniscos, fue muy duro, era la
primera vez que tenía una lesión de ese grado, nunca estuve internado, así que
la pase muy mal, estuve todo el año con fisio, el club se portó muy bien, el quinesiólogo
Omar Baldomiro fue quien me rehabilito, estuve así 8 meses tratando de mejorar
para llegar bien a este año. Bueno ahora con el tema de la pandemia no puedo
todavía, así que son inmensas las ganas que tengo de jugar, hace más de un año
que estoy parado y espero que pase todo rápido para volver.”
-¿Cuáles son tus expectativas para el regreso a las canchas?
“Estoy muy ansioso, arranqué la
pretemporada en Enero con los profes nuevos, veníamos bien, fue muy dura, yo
empecé a hacer fútbol, metimos amistoso, estaba arrancando ritmo de nuevo y me
sentía bien, toca esperar. Ahora entrenamos todos los das por el programa Zoom,
con el profe, nos conectamos todos y nos pasa la rutina. Estamos con ansias de
volver y tratar de dejar al club siempre arriba, nosotros nos entrenamos y
salimos a ganar en todas las canchas para buscar el progreso del equipo.”
-Durante los años en el fútbol, ¿tenes alguna persona que te haya marcado
sea técnico o compañero?
“Siempre me quedo con lo positivo de
cada técnico que tuve, pero el que más me marco de chico fue Mario Acuña que
tuve en Talleres, y tuve la suerte de tenerlo en la Primera de Atalaya, de él
aprendí muchas cosas, es una excelente persona y un gran formador de
jugadores.”
-¿Cómo te definís como jugador?
“Me defino como un defensor fuerte,
de buen juego aéreo, y que no se pone colorado a la hora de tirar la pelota a
la tribuna”.